Desde la organización de la Tarragona Baby League queremos dar unos consejos básicos:
- La mayoría de los padres sufren mucho en los partidos. Este sufrimiento es normal, porque lo que ocurre en un partido afecta mucho a los chicos; y a los padres, como es lógico, no les gusta que sus hijos lo pasen mal.
- Procure divertirse viendo los partidos de su hijo. Piense que es usted una persona afortunada, ya que tiene un hijo sano que hace deporte y se está formando para se un hombre de provecho. Prepárese para sufrir cuando vea jugar a su hijo, pero sin que su sufrimiento le haga perder el control y comportarse incorrectamente.
- El comportamiento de los padres en los partidos es importante para el rendimiento y la formación de sus hijos. También es importante para la imagen pública del club.
- Muchos jugadores jóvenes rinden peor si reciben instrucciones de sus padres, escuchan sus comentarios críticos, ven sus gestos de desaprobación o sienten vergüenza por su comportamiento.
- Su hijo rendirá mejor si usted se comporta con la discreción de un espectador educado. Deje que sean los jugadores y los entrenadores los protagonistas del partido. Disfrute como espectador sin interferir en el partido.
- Los padres que critican, menosprecian, ridiculizan o insultan al árbitro o a las personas del equipo rival, son un mal ejemplo para sus hijos.
- Procure ser un buen ejemplo, mostrando respeto a los árbitros aunque no comparta sus decisiones. Respete también a los jugadores, entrenadores y acompañantes del equipo contrario, aunque sean rivales deportivos. Y por supuesto, al entrenador y a los compañeros de su hijo. Este respeto debe estar presente siempre, incluso en los momentos más adversos.
- No se sienta provocado por la actuación de otras personas. Si los padres del equipo contrario se comportan con poca educación, no cometa el error de hacer lo mismo que ellos. No se ponga a su misma altura. Distíngase siempre por su comportamiento ejemplar.
- Las emociones que provocan los partidos, pueden alterar el comportamiento de los padres. Si usted está nervioso, enfadado o eufórico, piense que puede hacer para controlarse y actuar correctamente. Utilice estrategias que le ayuden a a lograr este objetivo.